viernes, 27 de octubre de 2006

Las primeras tutorías del curso

27 de octubre de 2006. Ya sabía yo que no podía tener ADSL y tiempo para usarla y, claro, el desagüe de la lavadora se coaligó con un atasco en el bajante comunitario y he tenido que ponerlo en manos de mis fontaneros y albañiles (como ahora está de moda poner todo en manos de "mis abogados", como si fueran un equipo de fútbol o algo así...), los cuales, dicho sea de paso, se portaron como unos chapuzas de primera. Hasta yo creo que lo hubiera hecho mejor si no fuera porque no trago el programa de bricomanía (que me perdone el manitas que no es nada personal). He tenido que llamar a otro equipo de profesionales y poner al primero en mano de mis abogados (si por lo menos apareciera en la tele para contar cómo va mi querella...) El caso es que durante casi una semana no he podido coger un libro ni dedicarme a los grupos de estudio, con lo bien encarrillado que iba todo. Menos mal que hay unos compañeros y compañeras majísimos/as y ya están ellos colgando apuntes por mí. Nunca nadie podrá saber lo que se siente cuando alguien te echa una mano en la Uned, pero es como si vinieran los Reyes Magos a traerte los regalos de Navidad.

Este año somos pocos, cada curso que pasa, menos, pero vamos quedando los mejores. La Uned es como la selección natural de Darwin pero a lo bestia, menos mal que sólo a nivel académico, porque si no podríamos acabar con la superpoblación del planeta a base de matricular a todo el mundo en esta universidad...

Ayer fue el segundo de dos días de tutorías que el Centro Asociado de Las Palmas de Gran Canaria organizó para los alumnos de 4º curso de Psicología. Sólo tenemos una tutoría al mes por asignatura y ni eso, porque alguna asignatura como Terapias Psicodinámicas y Humanísticas ni tienen. En primero asistí a algunas tutorías cuando estuve matriculado en el plan de estudios antiguo, pero cuando me cambié al nuevo me propuse emplear el tiempo de las tutorías en otra cosa, porque la mayoría de las veces era un tiempo mal invertido. Y digo la mayoría porque no siempre fue así. Algunos tutores, como D. Carmelo Hererra [el enlace ya no funciona] eran todo un lujo, trayendo fotocopias, apuntes y dando clases incluso algún fin de semana para preparar el examen. Por eso sus clases estaban llenas. Recuerdo una tiendita de fotocopias donde estos tutores dejaban el material y tú llegabas allí preguntando por tal o cual asignatura (la encargada debía saber más psicología que yo en aquella época) y te hacían las fotocopias correspondientes. En cambio otros, llegaban y te decían que ellos sólo estaban allí para resolver dudas y que si no las había se marchaban por dónde habían llegado; nada importaba que esa semana hubieras necesitado treinta horas cada día para haber podido estudiar los temas. Los peores eran los tutores que cancelaban las clases sin aviso previo; éstos eran muy graciosos, porque te hacía una gracia impresionante conducir durante muchos kilómetros para ir al centro asociado y encontrarte que no había venido el profesor; te reías por no llorar. Con ellos llegó la rabia y la frustración del estudio a distancia.

Lo mejor de todo, sin duda, fueron los compañeros de clase. A muchos los conocía del Curso de Acceso, otros me los encontré ese curso procedentes del COU, ya que en Las Palmas de Gran Canaria no hay facultad de Psicología.

Durante los tres primeros cursos de este nuevo plan de estudios no asistí a ninguna tutoría lo que no influyó en mis calificaciones, sin embargo, este año quería volver a sentir ese contacto cercano con el ambiente académico universitario; bueno, el poco que se puede respirar en la Uned. Y la impresión que he sacado es que todo sigue igual prácticamente que hace años: la manera de enfocar las tutorías, los compañeros (en este caso casi todos son compañeras), los tutores... Bueno, el centro ha mejorado y ahora ocupa otra planta en el edifico, con nuevas aulas, pero el ambiente sigue siendo el mismo. La lástima es que tenga que esperar casi otro mes para volver por ahí. Creo que al final iré a estudiar a la biblioteca para sentirme un pelín más universitario...

No hay comentarios: